El fútbol, como deporte rey, precisa de directores deportivos que sean un garante para las presidencias de los clubes de qué están gestionando bien los recursos respecto a la adquisición de fichajes
La profesionalización de los deportes implica que los clubes de las diferentes disciplinas tengan que contar con una infraestructura tanto económica como humana. Eso ayuda a optimizar, al máximo, las posibilidades de la entidad y hará que crezca más, con base en criterios de excelencia. Pero, ¿sobre quién o quiénes recae esa responsabilidad?
Son muchos los agentes que están implicados en los clubes deportivos para que el engranaje funcione. Por un lado, los entrenadores que se encargan de la parte deportiva directa, es decir, de establecer las rutinas, de sacar el máximo rendimiento a los jugadores, de dotarlos de estrategias en el campo, etc. Por otro lado, están las directivas y presidencias del club. En general son los que se encargan de las finanzas, los que gestionan el capital global de la entidad y baremar y hacen los balances.
Por último, en este artículo, vamos a nombrar a los técnicos deportivos, más bien a los directores deportivos. Pero, ¿qué es un director deportivo?, pues esencialmente, se trata de una figura más intermediaria entre los entrenadores, la directiva del club y la presidencia. Por regla general, tiene asignada la tarea de hallar a un entrenador acorde al club. Al mismo tiempo, suele tener a su disposición a una serie de personas que hacen de ojeadores y que van determinando qué jugadores son los más válidos. Pero la tarea es la de gestionar recursos para el club, que este sienta la seguridad de que los fichajes que se proponen, de que las transacciones que se gestionan y de que los recursos humanos deportivos del club están cubiertos.
Aunque puede ser más amplia la descripción, grosso modo, en eso consiste. También evalúan las técnicas deportivas utilizadas y, por supuesto, que el entrenador esté sacando el máximo rendimiento para los intereses del club y los jugadores, del mismo modo que estos cumplen con las cláusulas establecidas.
La importancia de formarse profesionalmente
Ante una necesidad real de los clubes deportivos, no solo de fútbol, sino de otros muchos deportes, esencialmente los colectivos, de contar con directores deportivos profesionales, se han establecido una serie de másteres y escuelas de titulaciones que elevan a la categoría de maestros expertos en la materia a las personas que cursen sus módulos académicos.
Así pues, uno de los más apreciados en este sentido es el Master in International Sports Management, una entidad como el High Tech Institute pone a disposición este máster con vocación internacional y con una doble certificación, tanto del propio HTI, como de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF). Las clases son íntegramente en inglés, con la máxima de que las canteras internacionales hay que buscarlas a lo largo del mundo, por tanto, el bilingüismo es esencial, la comunicación fluida con otros clubes y con los propios gestores de las carreras deportivas de los jugadores.
Otra de las grandes ventajas que ofrece este máster es que puede ser cursado desde cualquier lugar, ya que las clases son online y, además, también en streaming. En consecuencia, es una opción más plausible para combinarla con otros quehaceres cotidianos como los laborales e incluso para conciliar.
La vocación internacional ayuda a que las personas sean capaces de tener un nicho de empleabilidad global, por tanto, eso optimiza mucho los currículos del alumnado. Del mismo modo, la próxima edición comenzará en septiembre de 2023 razón por la que las plazas haya que reservarlas con celeridad en caso de no querer quedarse sin ellas.
Como resultado, quién sea un amante del deporte y quiera complementar sus conocimientos en un campo de especialización internacional y convertirse en un gran profesional de la dirección técnica de los clubes, este máster es la oportunidad perfecta.