Cuidar la salud de nuestros pies es muy importante. Sin embargo, es probable que a veces no les demos la atención que se merecen, hasta que notamos que algo anda mal. De ahí que es imprescindible acudir de manera regular con un podólogo, no solo para corregir problemas, sino también para prevenir que estos aparezcan y beneficiarte de otras formas.
¿Qué es la podología?
La podología en Málaga es una disciplina del área de la salud que se encarga de estudiar, diagnosticar y brindar el tratamiento adecuado para curar enfermedades y alteraciones que afecten los pies, por ejemplo, callos y durezas, uñas encarnadas, verrugas plantares, fascitis plantar, espolones calcáneos, deformidades como juanetes y dedos en garra.
También, se enfocan en la prevención y manejo de afecciones crónicas, lo que incluye el cuidado de los pies en pacientes con diabetes y prevención de úlceras. Sin dejar de lado que su trabajo también comprende el análisis de la marcha y el movimiento, fabricación de plantillas ortopédicas y tratamiento de lesiones deportivas.
Beneficios de la podología preventiva
Los beneficios más importantes de acudir al podólogo son los siguientes:
- Prevenir enfermedades: ayuda a monitorear y vigilar las infecciones, enfermedades o algún otro tipo de alteración en los pies.
- Disminución de las consultas quirúrgicas: acudir al podólogo puede ayudar a disminuir la necesidad de una cirugía.
- Menos dolor: los podólogos trabajan para reducir el dolor crónico, tanto en los talones, como en el resto de los pies.
- Mejor movilidad: este especialista también te puede ayudar a tener una mejor movilidad y capacidad para llevar a cabo distintas actividades en tu día a día, sin sufrir alguna limitación o molestias en los pies.
- Menos costes sanitarios: Cuando se invierte en prevenir y no en tratar, es posible ahorrarnos mucho más dinero. Las consultas al podólogo te pueden ayudar a reducir el costo de una atención sanitaria.
Cómo prevenir problemas en los pies con visitas regulares al podólogo
Las visitas al podólogo en Málaga son importantes para prevenir distintos problemas. Sin embargo, es necesario que estas tengan la frecuencia debida. Lo más recomendable es realizar consultas preventivas por lo menos una vez cada 12 meses, incluso aunque no tengas algún tipo de síntomas en los pies.
Ahora bien, las personas que sufren de alguna condición en específico, como enfermedades circulatorias, diabetes o deformaciones en los pies, deben consultar al podólogo con más frecuencia, siendo lo recomendable una vez cada seis meses. Esta frecuencia de consultas también aplica para aquellas personas que practican algún tipo de deporte de forma regular.
Por otro lado, en caso de que sufras algún dolor, enrojecimiento, inflamación o veas que cambia el color y la forma de tus uñas, es importante que acudas de inmediato al podólogo.
Rutinas diarias para mantener la salud de los pies
Para mantener una buena salud en los pies es fundamental seguir una rutina de cuidado que implica estos pasos:
- Higiene: lava todos los días tus pies con un jabón que sea neutro y suave y con agua que esté tibia. Debes secarlos bien, sobre todo entre los dedos.
- Hidratación: aplica de manera regular una crema que hidrate. De este modo, estarás previniendo la resequedad y los pies agrietados. Además, masajea cuando estás aplicando la crema.
- Calzado: debes usar zapatos cómodos y ajustados perfectamente a tu pie. También, deben ofrecer estabilidad y apoyo. Por otra parte, es importante que no uses siempre los mismos zapatos, con el objetivo de que estos respiren y se reduzca la humedad que se va acumulando.
- Ejercicios: incorpora estiramientos y ejercicios de los pies a tu rutina del día a día. Esto te permitirá tener una mejor flexibilidad y también prevenir dolores comunes.
- Durezas: puedes quitar las durezas de tus pies con una piedra pómez o una lija que sea especial para esta tarea. Debes hacerlo cuando la piel de tu pie esté blanda, puede ser después de ducharte o de haberlos lavado con agua tibia.
Uñas: mantén recortadas de manera recta las uñas de tus pies. También es importante que no las cortes demasiado cerca de la piel para evitar infecciones.