Para poder vivir España y conocerla en todo su esplendor, hacen falta más que siete días. Sin embargo, ello no quiere decir que en ese tiempo no podamos llevarnos una excelente impresión, que nos deje con ganas de volver. Es por eso que siempre es bueno llevar una guía de viajero para saber qué visitar en España en una semana.
Siendo este un país con tantos lugares por recorrer, todos ellos llenos de paisajes hermosos, arquitectura imponente, museos, historia y cultura. Lo mejor es saber de antemano dónde ir para sacar el máximo provecho al tiempo que tenemos.
Algunos itinerarios recomiendan recorrer un montón de ciudades, casi una diaria. Otros, prefieren una propuesta más calmada, que te permita conocer lugares que son una excelente carta de presentación. Eso sí, tomándose su tiempo para apreciar los detalles y llenarse con esa energía que ofrece cada localidad.
En esta oportunidad, nos quedaremos con la segunda propuesta, y nos centraremos en tres ciudades que son un ícono de España. Madrid, Barcelona y Toledo.
Día 1: Madrid, la gran ciudad
Una vez que has llegado a la ciudad, no hay tiempo que perder. Lo primero es dar un vistazo a la ciudad y su arquitectura. Puedes comenzar con un paseo de compras por la Gran Vía, allí, además de las tiendas, puedes conocer el Palacio de Cibeles. Si logras subir a la quinta planta, puedes tener una bella vista de toda la ciudad.
Día 2: Madrid, arquitectura impresionante
Ya con un poco más de tiempo, vale la pena darse un recorrido por los monumentos arquitectónicos, eso si, primero el desayuno en el Mercado de San Miguel, que es una delicia. Luego, es momento de pasear nuevamente por la Gran Vía y llegarse hasta la Puerta de Alcalá. Para relajarte un rato, termina esta parte del paseo con un rato en el Parque Buen Retiro y deja que el lugar te llene con su energía.
De allí, puedes ir caminando al Palacio de Cristal y seguir hasta la Puerta de Alfonso XVI. A esta hora ya te ha llegado la tarde y estás justo a tiempo para aprovechar dos horas del Museo del Prado, una parada obligatoria para conocer en Madrid.
Día 3: Madrid, un poco más de esta maravilla
Hoy puedes tomártelo con calma y repetir el desayuno en el mercado, ya que seguramente te ha parecido una verdadera maravilla para consentir a tu paladar.
Ahora sí, es momento de conocer el Palacio Real, la Catedral de la Almudena y luego terminar en la Plaza Mayor. Finalmente, termina el día disfrutando del atardecer en el Templo del Debod. Te aseguro que no olvidarás estos paisajes y es una linda forma de despedirse de esta ciudad.
Día 4: Toledo, la ciudad imponente
Toledo es una ciudad donde se guarda la historia de España. Allí se concentran las tres culturas más influyentes dentro de la española, que son los musulmanes, los judíos y los caóticos. Es por ello que a Toledo se le conoce como la Ciudad de las Tres Culturas. Para disfrutarlo y entenderlo, lo mejor es centrarse en la arquitectura.
El monasterio de San Juan de los Reyes, la Mezquita del Cristo de la Luz y la Sinagoga del Tránsito son tres ejemplos perfectos para conocer esta parte de la historia. Termina la visita en el Mirador del Valle, donde la vista es la más espectacular.
Día 5: Barcelona, la ciudad del arte
Nada más llegando a Barcelona, comienza el recorrido por esta bella ciudad por Las Ramblas y disfruta de las tiendas y cafés. De allí, puedes llegar sin problema al barrio Gótico de Barcelona y conocer la famosa Catedral, que es una parada obligatoria para llevarte una impresión completa.
Día 6: Barcelona y Antoni Gaudí
Lo primero en el itinerario es conocer la iglesia de la Sagrada Familia, que es un edificio único e irrepetible. De allí, no podemos seguir el recorrido sin parar en el Parc Güell, el parque diseñado por el mismo Antoni Gaudí, y que es una explosión única de naturaleza, arquitectura y color.
Y para continuar disfrutando de las obras de este artista, podemos tomar la avenida Diagonal, y deleitarnos con los edificios diseñados por Gaudí.
Día 7: Barcelona, arte y mar
Para cerrar esta semana hay que terminar de visitar las maravillas arquitectónicas de esta ciudad, comenzando con el Arco del Triunfo y la Basílica de Santa María del Mar. Y por supuesto, ya que estamos en la ciudad del arte, no podemos dejar de conocer el Museo de Picasso.
Y si te queda algo de tiempo, vale la pena tomar un transporte y llegarse hasta el Pueblo Espanyol y las fuentes del Montjuic. Las vistas para despedir la ciudad son las mejores.
Con esto te llevas una bella impresión de España y unas enormes ganas de volver y conocer mucho más, con suerte contando con algo más de tiempo.